La futura Façana Marítima prevé el desvío hacia el norte de la ciudad de nueve kilómetros de líneas férreas soterradas. Esto es lo que se establece en el Plan director elaborado por la Generalitat de Catalunya, que ubica la futura estación central del término municipal en el entorno de L’Horta Gran, que también estará bajo tierra.
El documento redactado por el gobierno autonómico prevé que las vías ferroviarias se «escondan» entre el final de la Platja Llarga y de la Savinosa, dejando libre toda la línea costera de la ciudad. Desde ese punto, las vías recorrerán el tramo de la antigua circunvalación hasta llegar a la Avinguda Marquès de Montoliu, desde donde enlazará con la Plaça Imperial Tarraco hasta llegar a l’Horta Gran, que es donde se trasladará la estación actualmente situada en el Passeig d’Espanya.
El concejal de Urbanisme del Ayuntamiento de Tarragona, Xavier Tarrés (PSC), indicó que la idea es que el túnel soterrado «no pase por debajo de edificios», y que los bajadores no se podrán empezar a construir hasta que se haya adecuado el futuro túnel». En esta línea, el máximo responsable del área de Territorio municipal no ve imposible que la obra sea una realidad para el año 2017.
174 millones de euros
El Pacte Nacional d’Infraestructures contempla una asignación de 174 millones de euros para el nuevo trazado ferroviario, que irán a cargo tanto por parte de la Generalitat de Catalunya como del Gobierno Central. Esta cantidad se debe invertir a lo largo del periodo 2009-2013.
Este dinero se gastará en base a las catas y las primeras obras que se realizarán, ya que los cálculos son que la totalidad de la transformación llegue hasta los 300 ‘kilos’. La parte ferroviaria la asumirá Renfe, mientras que el consistorio se encargará de la urbanización.