La notícia a eleconomista.es 11/01/2017
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, viajó ayer a Cataluña para reunirse con el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras. La número dos del Ejecutivo buscaba avanzar en las negociaciones de un paquete de medidas que permita “mejorar los servicios públicos” catalanes, mientras vetó cualquier intento del representante autonómico de abordar el referéndum independentista.
El viaje de Sáenz de Santamaría se enmarca en la llamada “agenda catalana” con la que el Gobierno de España busca resolver el conflicto catalán y que incluye la negociación de un paquete de 43 medidas o reclamaciones que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, presentó a Mariano Rajoy. Entre ellas se encuentra el aumento de la inversión en Rodalies, las Cercanías catalanas, por lo que cualquier proyecto de mejora que se pueda llevar a cabo está vinculado a que Rajoy y Puigdemont lleguen a un acuerdo, que, de momento, parece lejano.
Así de claro lo ha dejado el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, al ser preguntado sobre el futuro de las inversiones en Rodalies en un desayuno organizado por Europa Press. “Desde el ministerio estamos trabajando en un plan para Rodalies, pero éste forma parte de la negociación que está llevando a cabo nuestro presidente, Mariano Rajoy, y la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría en Cataluña”, explicó el titular de la cartera de Fomento.
En esta línea, añadió que desde el Ejecutivo hay que “hacer un esfuerzo inversor importante (en Rodalies) y estamos trabajando en ello. Lo estamos preparando junto a Renfe y Adif, que llevan tiempo desarrollando un plan que responda a las necesidades de Cataluña, pero hay que esperar a los resultados de las negociaciones con la Generelitat, ya que forma parte del paquete global de medidas que el Gobierno central debate con la región”.
En este punto, De la Serna, que ayer cumplió 46 años, reiteró que la titularidad de Rodalies seguirá en manos del Estado, ya que es una infraestructura de interés general, por lo que cerró la puerta de nuevo a la demanda de cesión hecha por el conseller de Territorio, Josep Rull”.
Pese a esta negativa, el ministro quiso abrir la puerta a compartir la gestión de las Rodalies y la toma de algunas decisiones de inversión o actuaciones.
Año “complicado” en gasto
Más allá del problema catalán, el Gobierno tiene sobre la mesa el reto de cumplir con los objetivos de déficit de la UE (3,6% del PIB), de rescatar las radiales y de preparar la red ferroviaria para la liberalización del sector en 2020. Por un lado, De la Serna aseguró que éste va a ser un “año difícil en inversiones en infraestructuras”, ya que su cartera sufrirá recortes como todas las demás en aras de cumplir con los compromisos. Aún así, dijo que gran parte del gasto se concentrará en el AVE que “tiene muchos tramos en construcción”. En cuanto a las radiales, dijo que las negociaciones con los acreedores son complicadas y que está tomando todas las medidas para “minimizar” el coste de la reversión. […]